Este 2021 ha dejado claro que la preocupación por la crisis medioambiental que sufre el planeta ha pasado a primer plano. Las catástrofes naturales sufridas este año, así como las cumbres del clima y nuevas leyes lo han puesto de manifiesto. El cambio climático se ha evidenciado como una preocupación social de gran importancia y esto también provoca cambios en el modelo de consumo. En línea con esto las nuevas tendencias de ecodiseño buscan encontrar el envase perfecto para ayudar a la crisis climática.
La concepción de los envases determina hasta un 80% de su impacto medioambiental. Por eso es tan importante encontrar el envase perfecto: aquel que tenga una huella ambiental nula o mínima y los acerca hacia un modelo de economía circular.
Las directivas comunitarias en Europa establecen la obligación de reciclar hasta el 55% de los residuos municipales y el 65% de los envases domésticos de cara a 2025. Además, en 2030 todos los envases de plástico tendrán que ser reciclables y las botellas de plástico deberán incorporar un 30% de material reciclado. Para alcanzar esas cifras, es necesario revisar la manera en la que hacemos las cosas.
En España, el ecodiseño es uno de los ejes de actuación con los que cuenta la Estrategia de Economía Circular puesta en marcha por el Gobierno. Además, en los últimos tres años 2.193 empresas españolas han aplicado 9.380 medidas para minimizar el impacto de sus envases. De esas medidas, 4.470 han ido destinadas a la reducción o eliminación del plástico y otros materiales perjudiciales para el medio ambiente en su fabricación. Esto ha permitido un ahorro de 49.000 toneladas de materias primas.
Como explican los expertos, hay dos factores fundamentales en la huella ecológica de un envase: el gas de materias primas y la gestión del residuo final. Por eso una de cada cinco medidas tomadas por las empresas van en el sentido de encontrar soluciones para aumentar la circularidad de sus envases.
Según Ecoembes, esto ha permitido reintroducir 37.000 toneladas de materia prima reciclada en la producción de nuevos envases. Encontrar el envase perfecto es una necesidad si queremos salvar el planeta. Debemos decir adiós al plástico y promover la economía circular.