España quiere formar una alianza medioambiental. ¿El motivo? Evitar que Bruselas catalogue como verdes la energía nuclear y el gas. Se plantea como un grupo de presión similar al bloque con el que ya plantó cara a la Comisión Europea para reclamar medidas frente al alza de las facturas de electricidad.
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha enviado una carta al Ejecutivo europeo. Dicha carta también estaba firmada junto a sus homólogos de Austria, Dinamarca y Luxemburgo. En ella, los países expresan su “profunda preocupación” por la reciente propuesta de Bruselas sobre la llamada taxonomía verde.
En la misiva, firmada el pasado jueves, los cuatro gobiernos lamentan que esta regulación corra el riesgo de perder su “utilidad y credibilidad”. “La propuesta de la Comisión pone en riesgo la transición energética en la UE y a nivel mundial y pone en peligro la Taxonomía al clasificar el gas y la energía nuclear como sostenibles, otorgándoles de facto el mismo tratamiento que a tecnologías verdes incuestionables como la energía eólica y la solar”, afirma el texto. “Consideramos que el nuevo proyecto es problemático tanto desde el punto de vista político como técnico”, añade.
La carta se ha hecho pública justo cuando los ministros de Medio Ambiente y Energía de los Veintisiete se reúnen en Amiens (Francia). Desde allí, Ribera ha remarcado que la propuesta de la Comisión es “controvertida”. Además, ha señalad que puede “distorsionar y generar confusión” respecto a las recomendaciones que ha venido haciendo Bruselas en materia de finanzas sostenibles. Su homóloga austriaca, Leonore Gewessler, ha asegurado que se plantea tomar “medidas judiciales” si la Comisión sigue por este camino.
Polémica sobre la Taxonomía
El Ejecutivo comunitario avanzó en abril del 2021 el grueso de medidas sobre la taxonomía. Pero dejó el espinoso debate sobre el gas y la nuclear para más adelante, a la espera de informes técnicos. Tras meses de espera, la Comisión presentó un borrador la pasada Nochevieja.
El documento levantó la polémica al designar como ‘verdes’ ambas tecnologías. Ribera ha señalado desde Ambiens que el catálogo debería incluir solo inversiones “que posibilitan la rápida descarbonización sin riesgos ambientales”. Por ello España quiere formar una alianza medioambiental para mostrar su desacuerdo con esta taxonomía.
La propuesta de la Comisión aún no es rotunda, pero los plazos para que se presente el texto definitivo se van agotando. Pero, cada vez, se suman más voces en contra. Habrá que esperar para conocer las decisiones finales.