España, comprometida con la lucha contra el cambio climático, ha anunciado que aumentará un 50% la financiación internacional contra este problema. El objetivo de esta aportación es el de llegar a 2025 con 1.350 millones de euros anuales, lo que sería el doble del compromiso actual.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha expuesto en la COP26 que «si elevamos nuestro nivel de ambición, tenemos que aportar también los recursos. Por eso, el objetivo [de la comunidad internacional] de los 100.000 millones va a ser una de las pruebas de fuego de la COP26 a la hora de recuperar la confianza entre los países del norte y del sur». Además, Sánchez también ha declarado que España aportará 30 millones de euros al Fondo Nacional de Adaptación de Naciones Unidas en 2022.
El presidente ha aludido al código rojo certificado por los científicos y ha señalado que «la buena noticia es que sabemos lo que hay que hacer, pero necesitamos determinación política y acción inmediata». El socialista ha expuesto que debemos reducir las emisiones y elevar nuestro nivel de ambición para conseguir que «la meta de un aumento máximo 1,5º siga estando a nuestro alcance».
Así, el presidente de España muestra su compromiso con la lucha contra el cambio climático y señala que hay que «seguir apostando por las energía renovables, la eficiencia energética y la movilidad limpia». Para Sánchez, «tenemos que abandonar nuestra dependencia de los combustibles fósiles». «Nuestras sociedades no deben ver la transición ecológica como una amenaza, sino como una inmensa oportunidad», concluyó Sánchez.
