No elijan la extinción

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha apostado por una campaña protagonizada por Frankie, una dinosaurio. Más concretamente, esta campaña busca concienciar acerca de los efectos adversos de los subsidios a los combustibles fósiles en las personas y el planeta. El corto se ha llamado «No elijan la extinción«.

Como ha señalado Ulrika Modeer, directora de la Oficina de Relaciones Externas y Promoción del PNUD, “el corto es divertido y atractivo, pero los temas que trata no podrían ser más serios”.

Según una nueva investigación del PNUD, por cada dólar prometido para hacer frente a la crisis climática en favor de los pobres del mundo, se gastan cuatro dólares en subsidios a los combustibles fósiles que perpetúan la crisis climática.

Este corto, más allá de entretener, transmite una realidad preocupante y que debemos revertir. Por cada dólar prometido para hacer frente a la crisis climática en favor de los pobres del mundo, se gastan cuatro dólares en subsidios a los combustibles fósiles que perpetúan la crisis climática. El mundo gasta 307.862 millones de euros al año en subsidiar los combustibles fósiles. Estas cifras son escandalosas, sobre todo en una situación como la actual. Según este mismo estudio, con ese dinero se podría cubrir el coste de las vacunas contra la Covid-19 para cada persona en el planeta.

El corto «No elijan la extinción» y el informe sobre el nuevo estudio se presentan la misma semana que la ONU ha enmendado los planes de los Gobiernos sobre el cambio climático. Además, ha pedido que estos dupliquen sus us promesas de recorte de emisión de gases invernadero para esta década.

El cambio climático es una realidad y es la crisis que define nuestra era. Eso es innegable. Por eso es tan importante que los esfuerzos de los Gobiernos vayan destinados a luchar contra esta crisis. No hay otra alternativa si queremos conservar nuestro planeta.